lunes, octubre 01, 2007

PARO DE FUNCIONARIOS MUNICIPALES

Este 1 de octubre, los trabajadores Municipales se manifiestan a través de un Paro de actividades a lo largo de todo Chile, en los 345 municipios del país. La razón es una ley que bajo el argumento de la Modernidad, busca desregular sus condiciones de trabajo. El actualmente llamado "artículo 121", facultaría a los Alcaldes a redefinir la planta municipal completa, una vez durante su período de gobierno. Existen muchas razones argumentadas. Que la baja rotación de los funcionarios, haría más difícil el adecuarse a los cambios tecnológicos; que existen herencias de gobiernos anteriores que trabajan en contra; que la estabilidad laboral de los funcionarios públicos actúa como una suerte de seguro contra todo evento, que finalmente hace que los trabajadores no sean responsables a momento de desarrollar su función de servicio, etc.
Es la primera vez que ejerzo el cargo de Concejal, y no puedo negar que muchos de estos argumentos me parecían más potentes un par de años atrás, cuando veía al mundo municipal desde fuera. Lo cierto es que en estos años me he dado cuenta que, aún cuando pueden subsistir ejemplos de personas que se pueden identificar con estos malos antecedentes, la mayoría de los trabajadores públicos tienen claros sus roles y son muchas veces las condiciones laborales y ambientales mesquinas las que les impiden ejercer de mejor manera sus labores. También me he dado cuenta de que no es tal la indefención que acusan los Alcaldes al momento de ejercer su dirección, para hacer que efectivamente los trabajadores cumplan con sus funciones, esto independiente del alcade de turno. Y por sobre todo me he dado cuenta que cuando se le entrega dignidad y respeto, estos trabajadores, que tienen que dar la cara por lo bueno y lo malo de los servicios, por las oportunidades y carencias de los municipios, son los primeros en comprometerse. No creo que mayores desregulaciones laborales vayan a resolver los problemas de financiamiento de los municipios. Y por encima de todo es necesario avanzar en la modernidad, con todos los actores involucrados. Si se sigue legislando sin la participación efectiva de los trabajadores, seguiremos teniendo "Transantiagos", modernidades mal implementadas, destinadas a ser parchadas o a fracasar.
A propósito de la realidad que se ha expuesto de nuestro Chile, respecto de los asesinatos a mujeres sometidas a violencia por parte de sus parejas, me ha parecido interesante este artículo que me ha enviado Luis Edo Corvalan, médico y vecino de Peñalolén. En él se indican verdades simples y directas que apuntan a la verdadera voluntad de resolver los problemas y no sólo hacerse cargo de las consecuencias. ¡Cuando haremos esfuerzos efectivos por prevenir, más que acusar el golpe de la leche derramada!
Femicidios y Labor Preventiva

por Christián Arévalo Rodríguez*

Recientemente, hemos sido testigos de diversos casos de violencia ejercida contra mujeres. En muchos de ellos, las víctimas han sufrido, con anterioridad, episodios de agresión en menor escala, que podrían haber sido objeto de intervenciones precoces que evitaran un desenlace trágico.

Es sabido que al interior de las familias en que se vive la violencia las parejas tienen un funcionamiento crónicamente establecido en que la agresión, el arrepentimiento, el perdón y las llamadas "lunas de miel" (períodos de "abuenamiento" de las parejas) se repiten interminablemente. Además, se sabe que tanto el agresor como la víctima suelen tener características de personalidad que les impiden cambiar esta dinámica, aunque exista una voluntad real de hacerlo.

Las mujeres que presentan rasgos de carácter que las definirían como vulnerables y tienen antecedentes de abusos vividos en su infancia, se instalan en una situación de víctima, buscando ayuda permanentemente en lugar de sobreponerse, lograr su autosuficiencia económica o tomar medidas realmente efectivas para evitar la violencia. Por otra parte, los potenciales agresores de estas mujeres tienen habitualmente distintos factores que pueden facilitar el uso de la violencia, tales como una escasa tolerancia a las frustraciones, inestabilidad emocional, descontrol de impulsos y dependencia emocional; características que les hacen buscar mujeres que compensen estas carencias emocionales, tornándose en extremo dependientes de ellas. Por ello, es que frente a la eventual pérdida de este vínculo pueden reaccionar de manera primitiva, sin medir las consecuencias de sus actos.

Existe, por cierto, otro tipo de perfil del agresor, en que predominan la frialdad afectiva, la autosuficiencia y la indiferencia por los sentimientos de los otros; en estos casos la violencia es parte de un cuadro que se asocia a conductas psicopáticas en todos los ámbitos de la vida.

La difusión mediática que han tenido los recientes femicidios podría tener un efecto adverso, pues podría instalar la imagen de estas acciones como un recurso válido en culturas en que el machismo sigue presente. Cabe preguntarse también si el crear una figura legal o el agravamiento de las condenas judiciales servirá para prevenir acciones que tienen características tan distintas a las de otros delitos.

Nos parece que una respuesta más efectiva del Estado sería el fortalecer las redes sociales a las que puedan acudir precozmente las víctimas y los potenciales agresores. Se hace necesario mejorar la capacidad resolutiva, organizar en forma coherente y evaluar los resultados de los múltiples programas y proyectos relacionados con el tema y que actualmente se encuentran en distintos niveles de los ministerios de Justicia, Salud y el Servicio Nacional de la Mujer.

Actualmente muchos de los servicios de atención de salud mental se encuentran agobiados por tener que resolver la demanda generada por las patologías cubiertas por el AUGE, de esta forma, se hace imposible poder realizar acciones preventivas e intervenciones psicológicas y psiquiátricas precoces que impidan que se sigan repitiendo hechos tan dramáticos como los que nos ha tocado conocer.

* Médico psiquiatra y académico de la Universidad de Las Américas

Acerca de mí

Mi foto
Casado, 2 hijos. El tercero de cuatro hermanos. Dirigente estudiantil durante finales de la dictadura militar en los 80. Con estudios de Ingeniería Química e Ingeniería Comercial. Dirigente social en Peñalolen, desde mi llegada a la Comuna en 1993. Fundador del Centro Cultural Juan Chacón Corona. Concejal del Partido Comunista de Chile, en la comuna de Peñalolén durante el período 2005-2008, lo que me permitió traducir el trabajo político en el mundo social. Para bien y para mal. Vivo en un país libre, cautivo del consumismo, del stress y del egoismo. Hoy, estoy enfrascado en buscar la otra parte de mi persona, que se quedó a la saga, esperando tiempos mejores...